Los calamares se pueden rellenar de tantas maneras como se nos ocurra (siempre dentro del sentido común, claro está), pero podemos optar por rellenarlos de carne, marisco, pescado, verduras... Normalmente cuando pensamos en calamares rellenos nos viene a la mente esa receta típica de nuestra madre bañados en salsa bastante aceitosa y suelen ser si más no, poco ligeros.

En la propuesta que os hacemos en este post, hemos pensado en aquellas personas que estáis a dieta o que pretendéis reducir ese par de kilos ganados tras las fiestas, por eso estos calamares están hechos sin grasa y a base de verdura y proteína.

Receta de calamares rellenos

Ingredientes

- 2 calamares grandes - 2 huevos - 6 gambas - 100 gr de pollo - 1 cucharada de leche - 1 cucharada de salvado de trigo - 3 palitos de cangrejo - 2 tomates maduros - 3 cucharadas de vino blanco - 1 cebolla - 1 ajo - Perejil, pimienta y pimentón dulce

Preparación:

Cocemos dos huevos en un cazo.

Mientras limpiamos bien bien los calamares. Separamos las aletas y las patitas y reservamos.

Picamos media cebolla bien fina y untamos una cacerola baja con un poco de aceite y quitamos el sobrante con una servilleta. Ponemos a fuego lento la cacerola con la cebolla durante unos 2 minutos sin dejar de remover.

Añadimos 2 cucharadas de agua y dejamos pochar hasta que se termine de hacer.

Mientras tanto, picamos las patas de los calamares junto con las aletas y los palitos de cangrejo con un poquito de perejil, sal y pimienta.

Cuando la cebolla esté lista, añadiremos la mezcla picada y dejamos que se haga a fuego lento.

Mientras se hace ponemos en la picadura el pollo junto con la leche y una pizca de sal, trituramos y añadimos a la mezcla anterior a la cacerola.

Cuando está dorado añadimos las 2 cucharadas de vino, removemos bien y dejamos que se evapore; añadimos las gambas removemos y dejamos que se pongan rosadas, las retiramos, pelamos, picamos y añadimos su carne a la cacerola de nuevo.

Dejamos que se vaya haciendo todo muy lentamente.

Mientras se termina de hacer prepararemos el sofrito de tomate: trituramos el tomate con el resto la cebolla y un poco de perejil (primero pochamos la cebolla en un poquito de aceite, después añadimos el tomate triturado y sofreímos lentamente).

Cuando el relleno esté listo (unos 5 minutos), le añadimos los dos huevos cocidos y picados, añadimos 1/2 cucharada de pimentón dulce y el salvado de trigo bien bien molido.

Por último, rellenamos los calamares con la carne del relleno que hemos preparado y los sellamos con un palillo.

Marcamos los calamares rellenos en la misma cacerola por la que habremos pasado una servilleta de papel para que no queden restos y Cuando estén dorados le echamos la salsa de tomate y dejamos unos 10 minutos hasta que se integren bien los sabores.